domingo, 5 de junio de 2016

LA DISOLUCIÓN DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA




Por: Luis Rafael García Jiménez.


INTRODUCCIÓN.

De acuerdo con Germán Carrera Damas (1997), el desmembramiento de la República de Colombia planteó, para la sociedad venezolana tareas fundamentales: deslindarse respecto al pasado colonial y de pasado colombiano. Comenzaban los venezolanos a definirse positivamente. Ya el problema no era definirse en cuanto  no eran españoles ni colombianos, ahora necesitaban definirse  en cuanto venezolano y por lo mismo, era necesario echar las bases de la organización republicana. Desde este punto de vista, la inclusión de Venezuela  en la república de Colombia constituyó una especie de transición entre el acto de ruptura del nexo colonial y el inicio de  la organización nacional.
 Las necesidades de la guerra  habían determinado  la posposición del ensayo republicano, como práctica, desde su adopción constitucional en 1811. En rigor fue tal la falta de cohesión de la república de Colombia y tan enfrentados estuvieron a la existencia de la misma los venezolanos que el ensayo republicano multinacional tuvo más bien un carácter formal.
En la conformación  o la creación de la República de Colombia lo que sí está bien claro era la superioridad de la Nueva Granada con respecto a la antigua Capitanía General de Venezuela,  ya que ésta última, se encuentra pobre y despoblada, en cambio, el  país neogranadino tiene mayor población y recursos, lo que es determinante para establecer en Bogotá  la capital de esta naciente conformación política-gubernamental, los venezolanos por su parte tiene desde el principio el sentimiento de subordinación ante esta situación. Los deseos de la separación siempre estarán presentes en los venezolanos.
La disolución de la República de Colombia se materializa en el Congreso Constituyente de 1830 realizado en la ciudad de Valencia; pero, la raíz del problema hay que ubicarla  a partir del año 1826.  Los hechos ocurridos van a constituir el primer enfrentamiento de los habitantes del Departamento de Venezuela con las autoridades de la República con  sede en Bogotá. La chispa se enciende cuando el general José Antonio Páez, por la fuerza, trata de hacer efectivo un alistamiento de tropas que había pedido Bogotá. Protesta el Intendente Escalona. Llaman  a Páez a Bogotá. Cuando  este se prepara para ir, se produce un motín en Valencia. Una Asamblea propone separar a Venezuela de Colombia y reconoce  la Jefatura de Páez, quien se abstiene de ir a Bogotá.
El proceso de la disolución de Colombia comienza cuatro años antes del Congreso Constituyente. Los habitantes del entonces territorio de Venezuela nunca ven con agrado que la capital de la República sea Bogotá y nunca se han identificado históricamente con los neogranadinos. Nunca se desarrollo un sentido de pertenecía con Colombia. El Estado Colombiano posee  un extenso territorio prácticamente  sin vías de comunicación y el centralismo implantado atenta  contra los intereses y sentimientos de pertenencia local y regional. Empero con la llegada de Bolívar se aplacan  los ánimos  momentáneamente  ya que la  mecha de la separación estaba encendida y el proceso de separación es  indetenible. 

 

La Cosiata.

Siguiendo lo planteado por  Arraíz (2009), la Municipalidad de Valencia, el 30 de abril de 1826, argumentando que el pueblo había caído  en un disgusto supremo como consecuencia de la separación del general Páez de sus funciones, y que esta circunstancia estaba por crear una crisis en el Departamento de Venezuela, acuerda restituirle el mando a Páez. Este acepta el mando el 3 de mayo por medio de una proclama.  El 5 de mayo la Municipalidad de Caracas reconoce la restitución del general Páez.
Estos hechos, que el pueblo denomina “La Cosiata”, aludiendo a una obra de teatro que entonces se presenta  en Valencia en la que un actor declina el vocablo “cosa”, son de suma importancia, ya que en la práctica manifiestan el descontento contra el  Poder Ejecutivo  radicado en Bogotá, y el  comienzo de lo que con el tiempo termina  por consagrase: la separación de Venezuela del proyecto bolivariano de Colombia.
El 14 de mayo de 1826, el general Páez jura ante la Municipalidad de  Valencia cumplir las leyes y hacerlas  cumplir, así como: no obedecer órdenes del gobierno de Bogotá.
El 29 de mayo, en sesión solemne de la Municipalidad de Caracas, juran ante Páez, ahora Jefe Civil y Militar, las  nuevas autoridades del Departamento de Venezuela. El general Santiago Mariño, segundo jefe militar, el doctor Cristóbal Mendoza (primer presidente  de la Confederación Americana de Venezuela en 1811), intendente; el doctor Suárez Aguado, provisor y vicario capitular;   el doctor Francisco Javier Yanes, presidente de la Corte Suprema de Justicia.
La autonomía del Departamento de Venezuela sigue  manifestándose, y una Asamblea  popular, reunida el 5  de noviembre de 1826 en la Iglesia de San Francisco, en Caracas, solicita, mediante voto popular, que se instaure “El sistema popular representativo federal”. Se solicita la remisión del Acta al Libertador, a quien invocan como mediador de la solicitud. Luego, a solicitud de Páez se reúne otra Asamblea popular el 7 de noviembre en la que  se asume una posición más radical en contra del gobierno de Bogotá. 
El 10 de noviembre se reúne otra Asamblea popular en Valencia;  el 13 del mismo mes se  señala por decreto la constitución de los colegios electorales para  el 10 de diciembre;   para el 10 de enero de 1827, la fecha de integración del Congreso Constituyente. Estas posiciones extremas del general Páez tuvo resistencia;   muchos temen que se avance rápidamente hacia una guerra civil. Incluso Bolívar anuncia su llegada, con lo que los ánimos se calman.
Simón Bolívar hace su entrada triunfal en Caracas el 10 de abril en compañía de Páez.  Está  en Caracas hasta el 4 de julio de 1827, dedicado a la organización de asuntos importantes para el funcionamiento del Estado colombiano  y el Departamento de Venezuela,  ignorando que ya no regresará jamás  a Caracas, su ciudad natal. Al irse, deja al general  Páez como jefe y comandante superior  de los Departamentos de Venezuela, Maturín y Orinoco, con lo que reconoce el liderazgo de Páez. En septiembre estará Bolívar en Bogotá, ejerciendo  la presidencia. 
En verdad, la otra alternativa que tiene es permitir que Venezuela se enfrasque  en una guerra civil o, algo todavía peor, intentar imponerse él mismo sobre la autoridad del general Páez cosa que lo alejaría de Bogotá, donde también se requiere  su presencia  no sólo para atender las conspiraciones en su contra, sino para hacer frente a la tendencia  separatista del Departamento de Quito. En  otras palabras: Bolívar no tiene  alternativa ante la situación del Departamento de Venezuela y reconoce el liderazgo de Páez, por más que al hacerlo desautorizan  al Congreso de Colombia reunido en Bogotá. 
Para  Siso Martínez (1973) el movimiento de la Cosiata:
… logró su objetivo. Separó de hecho a Venezuela de Colombia. A parir de ese momento el movimiento de desintegración se acelera: El hecho político de “La Cosiata” determina la formación de la oligarquía dirigente que con el nombre de conservadora va a dirigir los destinos de Venezuela (p. 432).

 La Convención de Ocaña.

De acuerdo con Ocanto López (1997),  en los años de irrupción de los grandes problemas nacionales, cuando los factores negativos de la integración colombiana hacen  necesaria la reforma de la Constitución de 1821, se realizó la Convención de Ocaña (pequeña población en el norte de Colombia, un lugar que se consideraba como el más central, con fácil acceso tanto para los venezolanos, neogranadinos, quiteños y de las regiones de la costa atlántica; y además, por considerarse apartado de los influjos exaltados de Bogotá y Caracas) entre el 9 de abril y el 10 de junio de 1828.
Es la Convención Nacional de Colombia, en la cual, cuando se busca orientar su destino hacia nuevos rumbos político-administrativos, surgen con fanatismo los enfrentamientos entre los partidos políticos y los grupos personalistas. Esto culmina  en su disolución con grandes consecuencias para la unidad colombiana. Entre dichos grupos se pueden mencionar los bolivarianos, los santanderistas,  los paecistas, los partidarios del centralismo y los partidarios del federalismo.
 La crisis colombiana no es  solo política sino que el ambiente de crisis general se extiende en todas las regiones de Colombia en una época de depresión financiera, bancarrota nacional, falta de víveres, escaso medio circulante, alza vertiginosa de  los precios.
La Constitución vigente es la de Cúcuta, promulgada en 1821,  es criticada por su carácter exclusivamente centralista (el poder está centralizado en Bogotá), en una época cuando se acentúan  los regionalismos y caudillismos en los Departamentos y provincias,  y se considera muy difícil la integración  política y administrativamente, en la práctica, tres países (Venezuela, Ecuador y la Nueva Granada) con elementos  humanos y economías disímiles, además de tener pocas vías de comunicación. 
El enfrentamiento entre los asistentes  a la Convención fue tal que los bolivarianos terminan por abandonar la Convención, lo que coloca el punto final a la misma el 10 de junio de 1828. Se ahonda,  aún más, el desacuerdo entre las partes en conflicto. 

 La dictadura.

En Bogotá una Asamblea  General integrada por el pueblo y las autoridades, acordó, el 13 de junio de 1828, ignorar todo lo decidido en la Convención de Ocaña y llamar a Bolívar para que se encargue  del mando supremo de la República de Colombia. Lo mismo hace Páez en Venezuela.  Bolívar llega a Bogotá el 24 de junio con poderes supra-constitucionales a fin de, paradójicamente, impedir la disolución de la república.
Simón Bolívar, de inmediato deroga y modifica leyes y gobierna en dictadura. Los meses que vienen, los conspiradores antibolivarianos intentarán matarlo, mientras Bolívar arreciará en sus prácticas autoritarias. Entre otras cosas, en noviembre de 1828 suspende a las municipalidades, dejándolas sin  objeto ni autonomía hasta nuevo aviso. En diciembre, se  apoya en la institución de las prefecturas y deja  de lado la de las intendencias. Se inicia en paralelo una discusión pública de la conveniencia de la instauración de una monarquía dados los ingentes problemas que ha traído la República;  sin embargo, Bolívar no comulga con la proposición, aunque respalda la idea de un presidente de la república vitalicio, Esto en la práctica, es lo mismo que la coronación de un monarca. Mientras tanto, las fuerzas separatistas de Ecuador, Venezuela, y las conspiraciones de la propia Colombia, no descansan.
El 29 de agosto de 1829, Simón Bolívar enciende de nuevo  las pasiones al convocar a  los pueblos a manifestarse acerca de la forma de gobierno que se desea, sobre la Constitución que debe servir de base al Congreso y sobre la elección del presidente de la República. Centralistas y federalistas desenvainan de nuevo sus espadas conceptuales.
El 18 de diciembre de 1829, el general Carlos Soublette escribe desde Caracas una carta dirigida al general José Tadeo Monagas:

Empieza Venezuela una nueva época o mejor diría, hemos vuelto al año 10, con la diferencia de que todos nos conocemos, y que estamos enseñados por la experiencia. Esta provincia y la de Carabobo se han pronunciado enérgicamente por la separación de la antigua Venezuela del resto del territorio de Colombia. (Documentos  para la historia de la vida pública del Libertador, tomo XIX, 1983. p.43). 
El 20 de enero de 1830 se instala en Bogotá el último Congreso de la República de  Colombia, bajo la presidencia de Antonio José de Sucre. Bolívar  considera  que en él se reunía «la sabiduría nacional, la esperanza legítima de los pueblos y el último punto de reunión de los patriotas…»; por esta razón, por la calidad de los diputados que concurren, se llama Congreso Admirable. Deben  asistir 67 diputados electos, pero sólo se presentan 48. Por Venezuela, son  elegidos 18 congresantes, pero faltan 10. Entre los asistentes figuraron Briceño Méndez, José Laurencio Silva, Sucre (fue el Presidente del Congreso), entre otros. Ante este Congreso bogotano, que sesiona hasta el 11 de mayo, Bolívar renuncia definitivamente a la primera magistratura de Colombia. 

Bogotá, 20 de enero de 1830.
Simón Bolívar.
Libertador presidente de Colombia.
Colombianos. Hoy he dejado de mandaros.
Veinte años ha que os he servido en calidad de soldado y magistrado. En este largo periodo hemos reconquistado la patria, libertado tres repúblicas, conjurado muchas guerras civiles, y cuatro veces he devuelto al pueblo su omnipotencia, reuniendo espontáneamente cuatro congresos constituyentes. A vuestras virtudes, valor y patriotismo se deben estos servicios; a mí la gloria de haberos dirigido.
(…)Compatriotas: Escuchad mi última voz al terminar mi carrera política; a nombre de Colombia os pido, os ruego que permanezcáis unidos, para que no seáis los asesinos de la patria y vuestros propios verdugos. Bogotá, enero 20 de 1830.
Y  deja el Poder Ejecutivo en manos del general Domingo Caicedo. El 2 de marzo Caicedo ocupa, como Presidente del Consejo de Ministros, la Presidencia de la República en reemplazo de Bolívar por haber este dimitido ante el Congreso. El 4 de mayo de 1830 el Congreso Admirable elige El presidente de la República a Joaquin Mosquera y a vicepresidente al general Domingo Caicedo, quien sigue al frente del gobierno hasta el 15 de junio, cuando llega  Mosquera a Bogotá. Del 2 al 17 de agosto de 1830 nuevamente asume el mando. EL 4 de septiembre retiraran  del mando tanto el presidente Mosquera, como el vicepresidente Caicedo después de los incidentes con el batallón Callao, y el 5 asume la dictadura de  Colombia el general venezolano Rafel Urdaneta.

  Causas que provocan  la disolución de la República de Colombia:

Causas políticas: 

 Los problemas que causan  la disolución de la República de Colombia son  causados, porque, después de la creación de esta, empiezan a ocurrir diferencias de  ideales entre  grandes representantes de esta gran nación: Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander,  José Antonio Páez.
- Adopción del centralismo como régimen político de la  República de Colombia: el centralismo constituye un serio obstáculo para las oligarquías regionales y para los caudillos locales, los cuales se oponen  a todo intento de establecer un poder nacional. Prevalece la tradición regionalista y el sentimiento federalista.
- La sede  del gobierno nacional queda establecida en Bogotá y no en Caracas, como su capital. De acuerdo con la Constitución de Cúcuta, Venezuela pasa a ser un Departamento de Colombia, bajo autoridades subalternas, dependientes de las autoridades nacionales radicadas en Bogotá, capital del Departamento de Cundinamarca.
- Descontento de los caudillos regionales con la supremacía de Bogotá.  La Municipalidad de Caracas había jurado condicionalmente la Constitución de Cúcuta. Los venezolanos quieren mayor autonomía en su territorio.
- Bolívar creador y sostenedor del proyecto colombiano, tiene que ausentarse varias veces durante la campaña de Liberación del Sur, además de su proyecto de creación de federación de Estados y la convocatoria al Congreso de Panamá;  mientras los separatistas, como Santander en Colombia, Flores en Ecuador y Páez en Venezuela, impiden la consolidación republicana y  acentúan  la rivalidad política.

-  Causas económicas:

 El cuadro de las causas económicas tiene relación con la centralización administrativa en Bogotá. Este hecho hace difícil la solución de los diferentes problemas. Estas causas son las siguientes:
a.-  La situación precaria de cada una de las naciones que comprenden la República de  Colombia, como consecuencia de la guerra. En efecto, hay una economía de subsistencia debido a que gran parte de la mano de obra para la agricultura, que era de campesinos jóvenes, ha muerto en la guerra. Hay escasez de ganado porque  este, principal alimento del ejército por su carne, ha sido consumido en gran parte.
b.-  La falta de renta suficiente por parte del Estado, lo mismo que la insuficiencia de impuestos municipales. Esto da como consecuencia,  por una parte, los bajos sueldos  de los empleados públicos y, por otra, la morosidad en pagar  por parte de la administración central o regional.
c.-  El reclamo que los militares hacen de que se les compense  por los sacrificios hechos durante la guerra.  Muchas veces se hace justicia de “motu proprio”  con el acaparamiento de tierras
d.-  La deuda externa contraída por la República de Colombia para sostener los gasto de la guerra. Las obligaciones fiscales del gobierno de Colombia son mayores que los ingresos  percibidos, esto ocasionaba un severo déficit. Estos problemas fiscales se deban, principalmente, a los gastos militares. Tres cuartas partes de los ingresos del gobierno se gastan en la milicia. El déficit constante obliga a solicitar más préstamos para responder por los gastos. Sin embargo, para 1825, los préstamos externos se paran por problemas financieros en Inglaterra y, en gran parte, porque los ingleses ya saben  que  Colombia no tiene capacidad de pago.
Desde mediados de 1826, la deuda de la República de Colombia con Inglaterra es, prácticamente, impagable. Anualmente, el pago de los intereses y la amortización de la deuda ascienden  a más de dos millones de pesos, lo cual equivale a la tercera parte de los ingresos de la República. La producción y el comercio están casi paralizados. (Disponible: http://www.iconosdevenezuela.com/?p=27961 Consulta: 16-03.14).

Causas sociales:

Un gran sector del pueblo venezolano, nunca se sintió identificado y relacionado históricamente con el pueblo colombiano o de la Nueva Granada, primordialmente la clase burguesa y oligarca que desde un principio, se oponen a la Constitución de Cúcuta, por lo que la sociedad  para la época de la República de Colombia, continua  tan  dividida como en la época colonial. Las desigualdades contribuyen a hacer insostenible la unidad colombiana. Los estratos sociales en Venezuela son los siguientes:
Una oligarquía de terratenientes esclavistas, formadas por militares que se habían hecho fuertes en las diversas regiones durante la guerra. Eran en sí, los que ocupan,  el rango que antes  había correspondido a los blancos criollos.
- Un estrato de empleados, comerciantes, artesanos, obreros y de gente que ejerce  profesiones liberales.  A este estrato pertenecen, en gran parte,  los empleados públicos. Los ingresos de esta capa son escasos y los impuestos numerosos.
- Peones de haciendas y antiguos soldados mal pagados o en gran mayoría desempleados. La situación de esta capa es de miseria.
- Los indígenas, que antes vivían en comunidades, y ahora independientes, por haber sido eliminadas estas. Eran un estrato marginado.
- Los esclavos y libertos. Como la esclavitud no fue suprimida sino sustituida por la “libertad de vientre” por la cual los hijos de esclavos a partir de 1821, son libres, mientras el resto continúa en la esclavitud. Se crea un fondo para manumitir, es decir, comprar la libertad de los esclavos; también, son creadas juntas de manumisión, pero, a fin de cuentas, la esclavitud queda. Ni los fondos de manumisión  ni las juntas, funcionan en forma efectiva. Los libertos engrosan la masa que vive en situación precaria.
 Causas geográficas:
-El factor geográfico influye de manera decisiva en el proceso de disolución de Colombia, ya que como ha sido la falta de comunicación y las largas distancias de la capital hacia el resto del territorio permanecen prácticamente incomunicadas.
  -El extenso y accidentado territorio de la república, debido a las condiciones de atraso económico y social de aquella época, dificulta su administración.
- Con el aislamiento de regiones tan distintas y alejadas entre sí como las que conforman la República de Colombia, es imposible mantener un régimen integrador como el centralismo.

 El segundo actor: Páez y la conciencia nacional.

Como ya se vio en el artículo anterior, el primer actor de la guerra de independencia fue Simón Bolívar, ahora le corresponde al segundo actor  de  los hechos históricos ocurridos en Venezuela y este es  Páez, quien atrincherado en la ciudad de Valencia y apoyado por las élites valencianas y caraqueñas materializará la Disolución. La ciudad de Valencia se convertirá en el epicentro de los acontecimientos o, mejor dicho, en el teatro de operaciones.  
Germán Carrera Damas (1985) señala que Páez asume  la Nación, mientras Simón Bolívar hace suya la emancipación:

Al luchar por esta, Simón Bolívar suponía que con ella advendría al reino de la razón y de la moral; al asumir  la Nación, José Antonio Páez permaneció en el ámbito de su razón y de su moral. Por eso, mientras Simón Bolívar fue un hombre del siglo XVIII, José Antonio Páez lo fue del siglo XX. (Pp.11-12).
 José Antonio Páez Herrera, General en Jefe, epiléptico y  ofidiofóbico, dominará la escena política venezolana a partir de la segunda batalla de Carabobo  (1821) hasta el tratado de Coche (1863), cuando concluye la Guerra la Federal,  es decir, durante 42 años. Si lo comparamos con Bolívar será desde 1813 hasta 1829, es decir 17 años. Para Bolívar fuimos colombianos; para Páez, venezolanos. No debe olvidarse  que es Páez quien inicia el culto al Libertador en 1842; quiso cambiar el nombre a Caracas por Ciudad Bolívar y al no lograrlo le cambia el de Angostura por Ciudad Bolívar, en 1846.
 Como es sabido, Boves y Páez logra aglutinar a su alrededor, como líderes absolutos a los llaneros, es decir, al pueblo. El autor de la Historia Constitucional de Venezuela, Gil Fortoul, desde su perspectiva positivista, cuando compara a Boves con Páez expresa: 

 Uno y otro empiezan con cerebros oscuros. Pero el cerebro de Boves se queda oscuro cuando el cerebro de Páez se va poco a poco iluminando. Aquel [Boves] es siempre el mismo, hasta su muerte, el otro [Páez] se transforma. El uno nació para odiar y vengarse; del vientre de su madre vino con instintos de bárbaro incivilizable. Del vientre de su madre trajo el otro la propensión a civilizarse, a servir a sus semejantes, y al fin se convence de que más arriba del instinto está la idea, sobre la pasión baja la conciencia alta sobre el interés momentáneo el ideal permanente." (1967, pp. 397-398).
Juan Uslar Pietri (1962) hace la siguiente referencia sobre Boves: Ciertamente no era un hombre brillante ni de esmerada educación, pero tenía buena letra, cosa extraordinaria para la época; era aplicado y conocía su oficio a la perfección [piloto marino]. Siempre se le observó  buena conducta,buena respetuoso y con gran amor al trabajo.

Gil Fortoul expresa más adelante:

… el general José Antonio Páez, llanera indómito a la autoridad de las leyes, aunque entendimiento fácil de ser dirigido por cortesanos que halaguen su ambición de mando y prestigio, tarda poco en aliarse con los promovedores de la tendencia separatista (p. 473).

Todo el mundo está convencido de que la transformación de Páez, de bárbaro ha civilizado, se le debe al contacto con la valencianidad y con su amante, Barbarita Nieves. En la historia del siglo XIX venezolano, tres gobernantes caen en el círculo valenciano: Páez, Linares Alcántara y Cipriano Castro. Como ya se dijo, Valencia es un centro jerquizante desde el período indígena que se fue consolidando durante el período colonial;  es para la época una ciudad tan importante como Caracas (fundada antes que Caracas alrededor de diez años antes) inclusive su cuadrícula es más extensa que la capital de la Capitanía. Mientras Caracas está enclavada en un valle rodeado de montañas, permitiendo  su avance solo hacia el Este, Valencia está abierta al horizonte frente a su lago.

La valencianidad y los sucesos políticos durante el paecismo:

 La primera muestra de  fidelidad de la valencianidad por Páez, se verá durante los sucesos conocidos como la "Cosiata". El 27 de abril de 1826, la municipalidad valenciana manifiesta su desagrado por la destitución de Páez como comandante general del Departamento de Venezuela. Tres días después, desconoce  abiertamente al gobierno de Bogotá, y restituye a Páez en el mando. Los sucesos originados por la valencianidad culminaron en Caracas con una Asamblea el 7 de noviembre donde se aprueba  la convocatoria de una constituyente.
Entre noviembre de 1829 hasta mayo de 1830, la valencianidad sigue  y apoya a Páez en el proceso de separación de Colombia.
El 24 de marzo de 1831 Páez es electo Presidente Constitucional. La capital será Caracas. ¿Por qué no Valencia? ¿Por qué, si Páez amaba tanto a Valencia, no la impuso como capital? Páez no volverá a partir de esta fecha a vivir en Valencia. Inclusive los últimos años de Barbarita serán en Maracay y ella morirá en Choroní. Después de cuatro años de su primera presidencia, se forma  una camarilla alrededor de Páez, dirigida por el doctor Ángel Quintero, hombre que siempre trabajó en función de un grupúsculo, como se diría el "cogollo".  De acuerdo con Juan Uslar Pietri (1970):
Los hombres que se reúnen alrededor de Páez son una mezcla de realistas, patriotas y viejos aristócratas coloniales. Pero es Páez el alma de ese régimen. Es alrededor de su prestigio indiscutible que se rige  el país (…).La oposición a su gobierno le viene de caudillos del mismo grupo, esto es, de independentistas, que gozan de una popularidad inmensa en sus respectivas regiones. (p.128).
En 1834 está en su hato de San Pablo cuando Vargas es depuesto (Revolución de las Reformas, julio del 35). El 23 de julio, Páez, frente al Morro de Valencia con sus lanceros, convencerá a viva voz a José Laurencio Silva de que debe sumarse a la constitucionalidad.
En 1838 es electo para una segunda presidencia que asume en febrero del 39.
En 1849, Páez trata de derrocar a Monagas pero fracasa; es derrotado por el coronel Muñoz en la batalla de los Araguatos (de allí le vendría el mote de "El Rey de los Araguatos"). Huye a Nueva Granada; de ahí, a Curazao; invade por la Vela de Coro y es derrotado por Zamora en la batalla de Casupo. Capitulando ante José Laurencio Silva, Páez será paseado por Valencia montado en un burro.
En 1858, gracias a la Revolución de Marzo, que derroca a José Tadeo Monagas, permite el regreso del exiliado Páez quien será recibido por miles. Para entonces Valencia es la sede de los poderes públicos nacionales. Páez permanecerá varios meses en la ciudad.
En 1861, el 18 de agosto, en Valencia, protestan contra el gobierno de Pedro Gual por haber solicitado la renuncia al jefe de los ejércitos de la república ejercido por Páez. En Valencia se da el grito de la insurrección contra el gobierno. Cuando Páez se proclama dictador. Ángel Quintero, se aleja de Páez y se va al exilio. Por allá, en Puerto Rico expresará:  "… no hay gobierno posible en Venezuela mientras resida en ella el general Páez…" (Nieschulz, 1997; p.793).
Recordemos a Bolívar, cuando pide disculpas por su reaccionaría dictadura: "…Además, bajo la dictadura, ¿Quién puede hablar  de libertad? ¡Compadezcámonos mutuamente del pueblo que obedece y del hombre que manda solo!" (Gil F, 1967 p629)
Páez cierra tristemente su vida política (lo mismo que Bolívar) asumiendo la dictadura; cuando pierde el poder, se cierra la puerta de los conservadores. Sus colaboradores más cercanos, lo abandonan, como lo hizo Quintero. La clase dominante, llámese valencianidad, realizará su reacomodo con los liberales. Atrás quedan muchas interrogantes.

  Consecuencias de la disolución de la República de  Colombia

 Ideológica:

- Significó el fin del ideal Bolivariano de crear un solo Estado al norte de la América del Sur.  Existen algunos conflictos y descontentos a nivel general ya que, de cierta manera, persiste en un régimen colonial en las naciones. La tendencia ideológica que está presente en las primeras décadas es la Conservadora para ser desplazada por los Liberal después de la Guerra Federal. Pero en la práctica del ejercicio del poder: los conservadores se comportan como liberales y éstos como  conservadores.

 Política: 

-El General José Antonio Páez se convierte en el primer presidente del nuevo Estado venezolano y gobierna (directa e indirectamente)  hasta 1863. Nació la República de Nueva Granada tras el Convenio de Apulo, el 28 de abril de 1831. Por este acuerdo, el general Rafael Urdaneta, último presidente de la Gran Colombia, entrega el mando de Nueva Granada a Domingo Caicedo. Nueva Granada está  integrada por las provincias de Bogotá, Tunja, Socorro, Vélez, Pamplona, Magdalena, Cartagena, Panamá, Veraguas, Antioquia, Neiva, Popayán, Pasto y Barbacoas. La Constitución de dicha República  se promulga el 29 de febrero de 1832. Comienza así una etapa de carácter centralista.  Francisco de Paula Santander es elegido Presidente de la nueva república el 9 de marzo de ese año. Gobierna  hasta 1837, cuando le sucede su vicepresidente, José Ignacio de Márquez.

Económica:

- Se reestructura una economía inestable, que para ese momento, no han logrado recuperarse de los desastrosos efectos de las guerras de independencia y de la crisis general de la economía mundial que se desarrolla a partir de 1820.  Los pueblos se encuentran en miseria y existe una escasez de mano de obra para el trabajo de la tierra.  La agricultura y la cría son destruidas por las acciones de guerra y por la necesidad de mantener grandes ejércitos permanentes. No hay  producción. Las principales actividades económicas giran alrededor de la producción de cacao, tabaco, café, añil y, de manera secundaria. Alrededor de la cría de ganado vacuno, caballar y mular. La producción agropecuaria, se encuentra destinada principalmente a la exportación; el comercio internacional consiste, fundamentalmente, en la exportación de los productos agropecuarios y en la importación de productos elaborados (manufacturas).  El latifundio continúa siendo la forma de propiedad territorial más difundida; el surgimiento de una élite militar adinerada acentúa este fenómeno.  El mercado interno es casi inexistente. El marcado carácter provincial y regionalista del período colonial, lejos de desaparecer se ve acentuado por los efectos de la guerra (disminución de la población, destrucción de caminos, entre otros.) Se abren o fortalecen otras conexiones comerciales con Gran Bretaña,  Estados Unidos, Francia, Holanda y las ciudades hanseáticas. El desarrollo industrial de la nación es casi nulo; la escasez de capitales para la inversión, la falta de combustibles (carbón principalmente) y de mano de obra calificada, unido a la debilidad del mercado interno arriba señalada, no permite el establecimiento de industrias que sobrepasaran el nivel artesanal.

- Social:

 La población se separa de una comunidad nacional. Las naciones sufren de una crisis social debido a las guerras con los españoles; es decir, la población está descontenta porque buscan paz y buenos gobernantes.  Existe rivalidad entre  los pobladores ya que unos están convencidos de un centralismo absoluto mientras que los demás buscan un gobierno más democrático. Para las clases desposeídas (la gran mayoría)  ni la independencia, ni la separación de Colombia, ni la conformación de un nuevo Estado constituyó, para ellos, una mejoría en su condición social. La pobreza generalizada era el denominador común de la población.

Referencias:

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