jueves, 19 de marzo de 2020

RESEÑA HISTÓRICA DE LA ESCUELA DE ARTES PLÁSTICAS ARTURO MICHELENA.





Valencia, 28 de de febrero de 2020.

Por: Luis Rafael García Jiménez.


Conferencia dictada en el marco del aniversario de la Escuela.


Introducción.
           
                     Quiero agradecer  a la Directora  de la Escuela profesora Marquelys Landaeta y a mi colega por muchos años en las aulas universitarias a la profesora Miriam Perales, por su generosa invitación para estar con ustedes este día del aniversario de la Escuela de Artes Plásticas Arturo Michelena. No me gusta, o mejor dicho, me desagrada llamarla EAPAM, porque me suena a una marca de harina pre-cocida, todo por esa manía de la Modernidad tardía de colocar y mencionar las cosas con abreviatura o iniciales.
            
                 En el transcurrir de mi corta  existencia temporo-espacial por este planeta de agua y un poquito de tierra que los humanos nos hemos empeñado en destruir,  he dado conferencias y he escrito artículos para revistas de Historia sobre la vida y obra de Arturo Michelena. Me faltaba hablar de esta Institución  con tanta solera valenciana como es la Escuela de  Artes Plásticas Arturo Michelena, ella conjuntamente con  la Escuela de Música Sebastián Echeverría Lozano (1937), con quien compartió sede en varias oportunidades, vieron nacer a las escuelas: de Ballet Nina Nicanórova (1948) y la Teatro Ramón Zapata (1958).  Así como todas las escuelas de artes del estado Carabobo entre ellas la Escuela de Folclore Benito Galarraga (1964); la Escuela de Música Manuel Leoncio Rodríguez (1971) en Naguanagua; el Conservatorio de Música del Estado Carabobo  (1989); la Escuela de Arte Leopoldo La Madríz (1991) en San Diego; la Escuela de Danzas Contemporáneas (2008); Escuela de Artes Andrés Pérez Mujica de Bejuma (1969);  la Escuela de Arte Arturo Michelena de Miranda (1952  adscrita a la Secretaría de Educación en 1976); y la Escuela de Música Pedro Elías Gutiérrez (1973) en Guacara (por cierto muchos piensan que Pedro Elías Gutiérrez fue el autor de la canción “Alma Llanera” pero en realidad  fue el natural de Villa de Cura (Estado Aragua) Rafael Bolívar Coronado autor de la letra. Pedro Elías le da la música para  una Zarzuela en 1914. Pero lo más interesante es que  la música de “Alma Llanera” es una adaptación  del vals “Marisela” de Sebastián Díaz Peña, natural de Puerto Cabello).

             El valenciano, escritor e historiador Enrique Bernardo Núñez,  quien fue Cronista de Caracas,  expresaba que: Valencia  era tierra de pintores y nos decía que el porteño, el escritor Ramón Díaz Sánchez la llamó la ciudad de los pintores (1992, p.48). Pero  se puede decir que esta tierra carabobeña es la cuna de pintores, escultores, músicos, poetas y sacerdotes.

            El presente trabajo se ha dividido  en cuatro partes. I. Las raíces culturales, en donde se hablará de la génesis de las artes en el actual territorio de Carabobo. II. De la colonia tardía  al siglo XIX, en donde se hará una sinopsis de los primeros pintores y de la actividad artística. III.  El arte y el siglo XX valenciano, se analiza los primeros pasos de instituciones dedicadas al arte. Y IV. Nace la Escuela de Pintura Arturo Michelena, se verá la evolución de la Escuela desde 1948 hasta la actualidad.

I.  Las raíces culturales.

Vamos a comenzar con una búsqueda de nuestras raíces, con nuestro pasado, como una manera de contextualizar el tema, ya que conocer el pasado permite comprender el presente. Como es sabido cuando los españoles invaden el actual territorio de Venezuela, ellos se encontraron con una población indígena escasa y dispersa. La conquista y la colonización fueron un lento proceso de gestación y fraguado de los núcleos primeros y primarios de poblamiento.  Para que tengan una idea la primera presencia de los españoles, en el actual territorio de carabobeño, fue en 1547 con Juan de Villegas quien llega al lago de los Tacariguas y pasa a establecer a Borburata en 1548.

La fecha que se ha tomado como probable fundación de Valencia es el año de 1555, doce años después, en 1567 Diego de Losada desde el Tocuyo pasa por Valencia llevándose  a muchos vecinos para fundar a Caracas. Con estos datos, a la mano, podemos hacer una comparación: para el año de 1520, de acuerdo con Salazar (1997), los frailes españoles establecieron verdaderos centros de formación para los  indígenas  como la famosa Escuela de Artes y Oficios fundada en la ciudad de México (Nueva España como era llamada entonces). Cuando en Valencia apenas se estaban construyendo las primeras casas rudimentarias ya en México treinta y cinco años antes  ya existía escuela de artes y oficios.   Pero no solo en México también hubo un florecimiento en  el virreinato del Perú, para la misma época.

Como bien lo señala Salazar (1997) en las obras pictóricas de estas antiguas colonias españolas, es fácil detectar el influjo del substrato cultural prehispánico. En lo que respecta a Venezuela y a Valencia, en nuestro caso, la pintura es simplemente de ascendencia hispánica, ya que sus artistas eran criollos o pardos (mestizos).
            
       Es necesario recordar  que en los primeros siglos del período colonial, el actual territorio de Venezuela dependía de la Audiencia de Santo Domingo, una parte del territorio, y el otro al  Virreinato de Santa Fe de Bogotá, será en 1777 (seis años antes de nacer el Libertador) cuando se crea la Capitanía General de Venezuela (génesis del actual territorio) con una autoridad militar-civil con sede en Caracas, estamos hablando de finales del siglo XVIII.  La población valenciana formaba parte de la Provincia de Caracas.  Es en este período  cuando los modestos colonos comienzan a prosperar gracias a la agricultura con su producción de cacao, convirtiendo a los blancos criollos (nietos o bisnietos de los primeros conquistadores) en acaudalados hacendados llamados los “Grandes Cacaos” o “Mantuanos”, en la mayoría de los casos gracias al contrabando.

         Si en la colonia eran contadas  las escuelas de primeras letras imagínense una escuela de artes y oficios. Daremos el siguiente dato: en el año de 1730, José Antonio de Rojas Queipo le solicita al Cabildo la construcción de una escuela de primeras letras, en 1740 la solicitó de nuevo e insistirá en 1752. Para  el 24 de abril de 1782 el Obispo Martí recomienda al Ayuntamiento de Valencia la creación de escuelas (Grooscors, 1968). El Ayuntamiento creará dos escuelas en Valencia para niños, una para leer, escribir, contar y otra de latinidad: poesía y retórica. Es una barbaridad, las primeras escuelas se van a crear  doscientos veintisiete (227) años después de su posible fundación.
             
         Los primeros pintores de aquella época colonial, como es lógico pensar, carecían  de estudios formales, ellos aprendían sus oficios de manera autodidacta  o con la compañía de otro artista de más experiencias  tal vez junto a un maestro que traía escasos estudios de España  en su mayoría eran frailes.

            Ahora bien, el auge económico  de los blancos criollos, como se diría hoy en día  los ricos o burgueses, en la colonia tardía, les permitió ciertos lujos como por ejemplo vestir a la moda europea o comprar obras de arte. Tenemos la referencia de Boulton (1971) que analiza testamentos dejados por blancos criollos y blancos peninsulares,  da cuenta de  gran cantidad de pinturas coleccionadas por ellos y en dicha lista o nómina   se encuentra el Maestre de Campo don Jerónimo Rodríguez de Lama que habitaba en Valencia, que poseía ochenta y cuatro cuadros (84) de pinturas. Él era el dueño del sitio de Las Aguas Calientes, es decir,  el Repartimiento de Las  Trincheras y San Antonio. De acuerdo con las Actas del Cabildo de Valencia el 13 de enero de 1710 don Jerónimo era Alcalde Mayor y Regidor Perpetuo. En la actualidad una escuela estatal, en Las Trincheras,   lleva el nombre de uno de sus descendientes Juan  Esteban Rodríguez  de Lama.

II. Los pintores de la colonia tardía al siglo XIX.

            Pasemos ahora a los primeros  artistas que hicieron vida en esta tierra valenciana. En la colonia tardía dará sus primeros pasos un  pintor conocido como Pedro Castillo, nacido en Villa de Cura (Estado Aragua) en el año de 1790 y no en Valencia como expresan muchos autores ( él fallece en Valencia en 1858), será el abuelo materno de Arturo Michelena y morirá cinco años antes de nacer el insigne pintor valenciano. Pedro Castillo realizará sus estudios elementales en Caracas, ya a los doce años de edad ya era conocido como dibujante al creyón y fino acuarelista, recibiría clases del pintor italiano Onofre Padroni (tenía una Academia Privada), siendo joven se trasladará a la ciudad de Valencia. Pedro Castillo será para Valencia lo que fue Juan Lovera para Caracas, se puede decir que a partir de ellos se pasa de las obras anónimas a las pinturas con nombre y apellido.
 
Cerramos el período colonial y comenzamos con el siglo XIX, este siglo en sus primeros veinticinco años serán dedicados a la independencia, aunque sabemos que ese siglo fue muy violento de guerras civiles y caudillos, pero a pesar de ello el arte y las letras lucharon por florecer.

            Después de la segunda Batalla de Carabobo, en 1821,  el general José Antonio Páez se va a residenciar en Valencia hasta 1831, siendo absorbido por la valencianidad, el prócer independentista  adquirirá una casona en el centro de Valencia ubicada en las  actuales calles   Boyacá y Páez, la acondicionará a su gusto y llamará a Pedro Castillo para que realice unos frescos y murales que representen las batallas en la cual él participó y así inmortalizar sus proezas militares. Años atrás Pedro Castillo, cuando José Tomás Boves  se apodera de Valencia tomaría preso, a don Pedro y lo obligaría a pintar cincuenta tambores.

            El poeta Luis Augusto Núñez expresó en su obra “Evolución y Génesis de la Cultura en Carabobo” (1967): que los  frescos y los murales de Pedro Castillo pintados en la Casa Páez eran: “de dudoso buen gusto” (p.241). “las  pinturas “no  tenían un refinado  gusto estético” (p. 242). Pero parece ser que el poeta Luis Augusto no tomó en cuenta que en el año de 1846: se encontraba derrotado y en el exilio el general José Antonio Páez; monagueros (simpatizantes del los hermanos Monagas) entraron en su casa y destruyeron las imágenes  de los frescos pintados por Pedro Castillo. Estos murales, según Galindez (1991) se conservaron, retocados varias veces. Alfredo Boulton (1971) señala que: por haber sido retocados esos frescos no son una buena muestra para poder apreciar la verdadera calidad artística de su autor. Esta se puede juzgar mejor en obras como el retrato de Juan José Páez (sobrino del general). De acuerdo con Guerra (1988), en la Catedral de Valencia existen una Virgen del Carmen y una Anunciación y, en la municipalidad de Valencia existen retratos de próceres de la independencia pintados por Castillo.

            Sobre el tema Enrique Bernardo Núñez  señala que: “estos frescos fueron objetos  de una persecución despiadada. Al final unos pintores de brocha gorda se encargaron de hacerlos desaparecer bajo gruesa  capa de pintura.  Quedaron las batallas en el corredor, aunque bastante mal retocadas. Quiero confesar que cuando conocí al poeta Luis Augusto Núñez en  conversaciones en los pasillos de la Casa Páez compartía su opinión sobre la calidad artística del pintor y la cambié cuando preparaba esta conferencia. Y durante mi Presidencia de la Sociedad Bolivariana el maestro Toledo Tovar me comentó que  en una oportunidad pasada él había realizado trabajos de restauración de los murales.

En los inicios del siglo XIX según Guerra (1988) en el año de 1805 en el Colegio de Niñas se dictaban clases de dibujo, música y canto. En el Beaterio de las Carmelitas  en 1814, se dictaban  clases de Bellas Artes, dibujo, música y bordado a las niñas. La Diputación Provincial de Carabobo decreta una ordenanza en 1849, en donde se obligaba a los profesores particulares o privados de Artes y Oficios a publicar carteles de ingreso para asistir a sus talleres. Para el mismo año de 1849,  llega a Puerto Cabello  Miguel Alejandro Römer, dibujante y pintor. En el año de 1850, José Antonio Fernández Feo y su hermano Federico, iniciaron la enseñanza  de Dibujo Lineal -dictada por José Antonio- y la de Dibujo Técnico aplicado a las ciencias y a las artes -dictado por Federico-. Guerra (1988).

Es interesante acotar que para el año de 1850 en el marco del centenario del nacimiento del Mariscal Sucre, fue develado ( 02 de febrero) en el Capitolio de Valencia un retrato al óleo pintado por Juan Antonio Michelena. El 03 de febrero, fue develado en el Salón Legislativo, el lienzo "Bolívar en Carabobo" pintado por Arturo Michelena. Y el 04 de mayo fue develado un retrato de José Gregorio, pintado por Juan Antonio Michelena.

            Para el 11 de diciembre de 1854 la Diputación Provincial de Carabobo creó la  Escuela de Dibujo y Pintura que funcionó  en el Colegio Nacional de Carabobo: Su Director era nombrado por el Concejo Municipal, a propuesta del Rector de dicho Colegio (Guerra, 1988, p.169). Al preceptor se le asignó un sueldo de  mil pesos anuales; entre sus deberes estaba el de montar una Academia haciendo de su peculio todos los gastos necesarios. El profesor de Dibujo Natural era Juan Antonio Michelena y Luciano de Urdaneta encargado de Dibujo Lineal y Topografía. En el año de 1859 estuvo en Valencia el pintor francés P. Crabarsol  y pintó un retrato óleo del General José Antonio Páez (se encuentra en el Museo Casa  Páez).

            En el año de 1870, en la ciudad de Valencia, funcionaban dos academias particulares o privadas de pintura: una regentada por Emma Siveira que funcionaba en la casa de familia Hensen y la otra dirigida por Antonio Michelena. Algunos autores dicen que  la Escuela estaba dirigida por Antonio y su hijo Arturo, dato que no es correcto, ya que para esa fecha Arturo Michelena contaba con siete años. 

           De Antonio Michelena, algunos autores regionales y nacionales como Alfredo Boulton (1971) expresan que nació en Valencia, lo cual es falso, él nace en Puerto Cabello el 13 de febrero de 1832  y fallece en Valencia en 1918. En 1837 su familia se trasladará a Caracas, en esta ciudad estudiará en la Academia de Dibujo y Pintura, dirigida por Antonio José Carranza, en 1850 se vino a Valencia. Los últimos años de su vida se desempeñará   como director de la Casa Páez (a partir de 1910). De este pintor se puede decir, de acuerdo con Guerra (1988) fue un hábil retratista, político y guerrero. Según Boulton: Antonio Michelena fue militar y pintor, habría sido alumno de Carmelo Fernández en la Escuela de Dibujo y Pintura de Valencia” (1971, p.70). Este último dato no es correcto, ya que Carmelo Fernández (sobrino de Páez), pintor, militar y político estuvo residenciado en Valencia en 1833 y Juan Antonio Michelena tenía solo un año de nacido. En esta ciudad  Carmelo Fernández se dedica por un tiempo a la miniatura y al poco tiempo regresa a Caracas, en el año de 1877 figura en la Directiva de la Escuela Nacional de Bellas Artes.

                        Cuando un 16 de junio de 1863 nace Francisco Arturo Michelena Castillo, Valencia es una  ciudad pequeña y tranquila, con pocos habitantes, que tocaba el umbral de la tristeza, sus calles de tierra, mal mantenidas; en una cotidianidad pueblerina de un país pobre, de guerras civiles y llena de incertidumbre. La casa natal del pintor estaría ubicada en la antigua calle Puerto Cabello, hoy Díaz Moreno, cruce con calle el Sol, hoy calle Páez; era una modesta vivienda, ya demolida (por el afán de acabar con el pasado arquitectónico y convertir el centro de Valencia en un laberinto de locales comerciales) y en el comercio actual solamente queda una inadvertida placa (colocada en 1948) que señala a los distraídos transeúntes, que en ese sitio nació Arturo Michelena. Diez años después  de acuerdo al censo de 1873 la ciudad arrojaba un total de 16.340 habitantes  Boulton expresaba que: “su infancia, su adolescencia y los balbuceos pictóricos los tuvo en Valencia natal, al lado de su padre, su primer maestro. Era, por lo tanto un aprendiz que llegó a París”. (1971, 71).

            Es necesario aclarar que Michelena además de su padre, recibirá clases particulares con la francesa Constanza Sauvage. Su muerte prematura (35 años –tiempo biológico- en 1898) conspirará para catalogar a Michelena como un maestro completo o de un genio maduro; ya que dejará comenzado ese maravilloso viaje mágico de su creación; pero lo que cuenta en su obra creadora es lo que nos dejó, en su carrera contra el tiempo de la vida y el tiempo inevitable de la muerte, y no lo que ha podido hacer. En su extensa obra se pueden constatar rasgos realistas, románticos, parnasianos e incluso algunos críticos ven rasgos impresionistas, pero, en honor a la verdad, a Michelena no le interesó lo que la escuela impresionista aportaba; él era un hombre de su momento, de su pasado presente. (García, 2006).

            Hablemos de otro gran Maestro valenciano que de acuerdo  con la creencia de algunos escritores regionales para el año de 1883, con diez años de edad Andrés Pérez Mujica (1873-1920) comenzó a estudiar pintura en la Escuela de los Michelena y a los diecisiete (1890)  años de edad estará en Caracas cursando estudios en la Academia de Bellas Artes, bajo la tutela de los escultores Ángel Cabré y Cruz Álvarez; así como pintura en la Academia de Arturo Michelena.  Pero según Figuera (1997, p.586), Mujica estudiaría  en la Academia en 1896. Por otra parte Arturo Michelena abrirá su Escuela en la Pastora en 1895, por tal motivo es lógico deducir que Pérez Mujica estaría en ambas escuelas después de los 23 años y no a los 17 años de edad como piensan algunos escritores carabobeños.

            Con respecto a Herrera Toro (1857-1914) seis años mayor que Arturo Michelena, realiza sus primeros estudios en el colegio la Viñeta del sabio positivista Adolfo Ernest. A partir de 1869 recibe clases de Martín Tovar y Tovar y de José Manuel Maucó. En Valencia se puede apreciar su obra en el plafond del Teatro Municipal, así  como murales en la Capilla del Santísimo Sacramento.

            No se puede pasar por alto al pintor Armando Reverón (1889-1954), que dio sus primeros pasos artísticos en esta tierra, tenemos que: Con seis años de edad sus padres se divorcian en 1895 y su madre se ve obligada a trasladar a su hijo a Valencia con la familia  Rodríguez-Zucca. En esta ciudad estudiará en el Colegio de la Salle y luego en el Colegio Cajigal del Doctor Alejo Zuloaga. En 1898 con nueve años estudiará en la Academia o Estudio de Antonio Michelena (su hijo Arturo murió ese año) y en 1901 realiza su primer encargo por parte de un comerciante.

III. El Arte y el siglo XX valenciano.

            Pasemos ahora al siglo XX y entramos de lleno al tema. Durante la dictadura de Juan Vicente Gómez entre 1908 y 1935, se tiene los siguientes datos:

- El 30 de noviembre de 1900, mediante decreto del Ejecutivo del Estado Carabobo se designa como directora de la Escuela de Pintura y Dibujo a Emilia Travieso de Díaz Morly, en la Escuela Supernumeraria para Niñas en el Caserío El Roble.

- Pero el 20 de agosto de 1901 el Ejecutivo del Estado Carabobo, decreta convertir en Escuela de Corte y Costura a la Escuela de Pintura y se nombra para regentarla a Luz D´Sola.   

- El 15  de mayo de 1908, el gobernador  de Carabobo Samuel Niño, adquiere la Casa Páez (para la época propiedad de la familia Arroyal) y la destina para Biblioteca del Estado y Museo Regional y Nacional.

- El 03 de mayo de 1910, se decretó la designación de la Casa Páez como sede de la Escuela de Bellas Artes, la cual albergaría en su seno las escuelas de pintura y de música.

- En 1921, Tatania de Pérez Mujica  organizó el Museo Páez y se dictaban talleres de pintura.  Al poco tiempo el régimen gomecista convirtió la Casa Páez en cárcel y en las paredes del sótano se puede apreciar los grafitis dejados por los presos.

- En 1925, Leopoldo la Madríz, con veintiún años de edad, según Galindez (1990) comenzaba a ejercer con éxito  su profesión  de pintor. Expone sus lienzos en botiquín “El Monolito” de Enrique Küper.

- En el año de 1928, a la edad de  once años Braulio Salazar comenzará sus estudios de  dibujo y pintura con la pintora Emma Siveira: En 1935 realizará su primera exposición en la botiquería “La Tropical”.

            Después de la muerte del dictador Juan Vicente Gómez, durante el gobierno de Eleazar López Contreras, de acuerdo con Guedez (1998): en el diario El Aborigen, se imprimió un folleto que fue  repartido en la plaza de toro Arenas de Valencia, titulado:”Valencia cuna de artistas necesita una escuela de Artes”, los autores intelectuales y materiales fueron: Braulio Salazar, Pedro Lizardo y Rafael Aguiar.

            En 1936 se funda el Ateneo de Valencia, lo inaugura María Clemencia Camarán y un grupo representativo de la valencianidad.

            En el Ateneo de Valencia en el año de 1939, Braulio Salazar presentó al pintor Guillermo Párraga, exponente de varias de sus obras expresó lo siguiente: “En Carabobo no ha existido nunca una escuela de pintura y no creo probable que pueda existir, y es por ello que algunos de nuestros pintores se han preparado solos”. (Galindez, 1990; p.246).

                        Durante la  presidencia de Medina Angarita, en el año de 1943, siendo gobernador de Carabobo Tomás Pacanis se creó el 19 de abril y publicado en Gaceta el 30 del mismo mes la Escuela de Bellas Artes con las cátedras de Música, canto, dibujo, pintura, escultura y artes aplicadas.  Pero esta escuela no llegó a concretarse, tal vez por lo lento de la burocracia.

IV. Nace la Escuela de Pintura Arturo Michelena.

            En el año de 1945, en la Escuela Nacional Normal, ubicada en la  avenida Soublette entre Colombia y Páez (antigua sede del Convento de las Siervas del Santísimo Sacramento), funcionaba la escuela de Música y un espacio para el Taller de Pintura que fue inaugurado el 11 de marzo de 1945 (Medina Angarita todavía en el poder), la idea de su fundación fue concebida en el Rotary Club por el doctor Jorge Lizardo. Su horario sería nocturno, era libre y no tenía escolaridad y por tal motivo no tendría egresados.

            En el año 1946, ya en el Trienio Adeco (1945-48), la Escuela Normal  de estatal paso a  nacional, es decir,  depender directamente del Ministerio de Educación. Se mudó de su sede original y tuvieron que salir de ella la Escuela de Música y el Taller Libre de Pintura, mudándose el Taller a una pequeña casa ubicada en la antigua calle Cedeño cruce con Díaz Moreno.

            El 02 de febrero de 1947, el gobernador Manuel García decreta la creación de una beca para cursar estudios de Pintura en el exterior. Durante la gestión de este gobernador se realizaron reparaciones en la Casa Páez. Y el 28 de febrero de 1948 (15 días antes de la toma de posesión de Gallegos como Presidente), se decreta que la Casa Páez sea el asiento de la Escuela de Bellas Artes del Estado Carabobo; la cual quedó  conformada por la Escuela de Música “Sebastián Echeverría, el Taller Libre de Pintura pasaría a llamarse Escuela de Pintura  “Arturo Michelena”. Es necesario acotar el papel del Rotary Club, ya que dicha  institución privada apoyaba al Taller de Pintura y con el apoyo de Braulio Salazar se logró la Escuela, quien sería  designado como Director de la Escuela cuyo cargo ejercería hasta 1970, serán 22 años de fructífera labor. Durante la dictadura  de Pérez Jiménez la Casa Páez pasó a manos del Ministerio de la Defensa y funcionaría la circunscripción militar, hasta  1960 cuando Mons. Adam le solicitó al Ejecutivo Regional  la Casa Páez como sede de la Sociedad Bolivariana (García, 1990).

            Es interesante señalar el carácter clasista de los estudios de las artes en esos tiempos, porque los alumnos que encontraremos son la pura cepa de la valencianidad, las familias más importantes y reconocidas por apellido y dinero eran los que tenían el acceso a la educación de las bellas artes, sin mencionar la educación formal. Se puede ver con suma claridad las manos de la clase social dominante en la formación del Ateneo, la Escuela de Música, la Escuela de Ballet y la Escuela de Pintura. Menos la Escuela de Teatro que albergó a simpatizantes de la izquierda. La Valencianidad además de ser un sentimiento de pertenencia al terruño también es un símbolo de clase y poder aunque sea a punta de apellido, todavía en el 2020 el valenciano le presta  mucha atención a esa circunstancia.  La Escuela de Pintura en sus primeros años de funcionamiento los cursantes eran jóvenes  de la alta sociedad valenciana, me atrevo a señalar que será a partir de la década de los años 60` disminuye esa distinción de clases. La Escuela de Pintura tiene que verse y estudiarse en un antes y después de Braulio Salazar.

            De Braulio Salazar nos dice Contreras: “este insigne pintor valenciano de pura cepa, el de las Cocuicitas como acostumbraba denominarse en los ratos de bohemia (que no son pocos)”. (1996, p.68). En una entrevista realizada a Vladimir Zabaleta, Director de  la Escuela entre enero de 1979 a septiembre de 1980,  aparecida en la obra de Páez (2012):

“… Braulio Salazar (…) personaje importante  y beligerante en todas las decisiones que tenían que ver con el arte y la ciudad, llámese Salón Michelena, Salón Internacional del 55, elección de los jurados de Caracas, elección de los jurados de Valencia. Él era el director, el que realmente dirigía la batuta del Salón Michelena”. (pp. 42-43).

            Entre los años 1948 y 1949 dictan clases en la Escuela de Pintura:

1.- Leopoldo La Madríz.
2.- Beatriz  Mendoza Sagarzazu.
3.- Braulio Salazar.
4.- Claudio Mimó (español)
5.- Eulalio Toledo Tovar.
6.- Francisco Betancourt
7.- Lita Guerra como secretaria, luego ejercería funciones docentes.

            La Escuela ha contado entre sus profesores a excelentes poetas y escritores tales  como: Eugenio Montejo, Alejandro Oliveros, Reinaldo Pérez Só, Pedro Téllez, Carlos Ochoa entre otros.

            El 30 de septiembre de 1950, de acuerdo  con la Gaceta Oficial del Estado Carabobo se designa a la Escuela de Pintura como Escuela de Artes Plásticas  Arturo Michelena  de manera oficial.
            El gobernador Ricardo Arroyo Luder mediante Decreto, con fecha 31 de marzo de 1954, se designa la sede para la Escuela de  Arte  Plásticas Arturo Michelena; esta nueva sede sería la antigua edificación para el dormitorio  de los guardias que custodiaban  la cárcel pública de Valencia. En el año de 1956 la Escuela de Artes Plásticas y la de Ballet son trasladadas  a la calle Libertad. En diciembre de 1959, esta nueva sede será  ampliada y refaccionada.

            En el año de 1955, en el marco de la celebración del Cuatricenterio de Valencia, se realizará una exposición con los siguientes pintores: Arturo Michelena, Pérez Mujica, Abdón Pinto, Leopoldo La Madríz, Braulio Salazar, Luis Eduardo Chávez, Toledo Tovar, Suárez y Vigas entre otros
.
            El 23 de mayo de 1957, se decreta el Reglamento Nacional de las Escuela de Artes Plásticas y Aplicadas,  por medio del cual se establece que deben funcionar cuatro secciones:

1.- Sección de Arte Puro: preparación técnica práctica a pintores y escultores.
2.- Sección de artes Aplicadas: preparación técnica práctica de artífices especializados.
3.-Sección de Formación Docente: preparación de docentes de artísticas y manualidades.
4.- Sección  de Cursos Libres: formación docente para profesores de pintura y escultura.

Este decreto solo tendría una vigencia de ocho meses, debido al derrocamiento de la dictadura.

            Desde 1948 hasta 1958 han estudiado  en la Escuela Arturo Michelena, entre otros:

-          Pablo Vásquez.
-          Mauro Mejías (Premio Michelena).
-          Rafael Pérez.
-          Armando Pérez (Premio Michelena).
-          Manuel Mérida.
-          Darío Pérez Flores.
-          Manuel Espinoza.

De acuerdo con información suministrada por la profesora Miriam Perales (2020), del período antes señalado hasta la fecha, por la Escuela de Artes Plásticas Arturo Michelena, han pasado por sus aulas reconocidos artistas que algunos sin haber egresado han desarrollado una obra relevante, entre ellos se pueden mencionar:

      - Esther Ojeda.
-         -  Ángel Ramos Guigni. 
      - Gabriel Bozzone (caricaturista  del diario el Carabobeño) 
-          Marcos Castillo.
-          Alexis Mujica (Premio Andrés Pérez Mujica).
-          Adolfo Estopiñan (Premio Michelena).
-          Bárbara Correa.
-          Jorge Véliz (Premio Michelena).
-          Jorge Pérez.
-          Ramón Belisario (Premio Andrés Pérez Mujica).
-          Eduardo Latouche (Premio Salón Aragua).
-          Lula Bertrand.
-          Mercedes González (Premio Salón de las Artes del Fuego y del Salón Barquisimeto).
-          Rogelio Morales (Premio Andrés Pérez Mujica).
-          Rubén Calvo Premio Municipal de Maracay).
-          Carlos Rojas.
-          Francisco Bugallo (Premio Michelena).
-          Henry Mujica (Premio Salón Municipal de Maracay).
-          Elizabeth Marrero.
-          Carmelo Zambrano (Premio Salón Güigüe y Bolsa de Trabajo en el Salón Michelena).
-          Víctor Julio González (Premio Salón Aragua).
-          Miriam Perales (Premio Salón Güigüe).
-          Juan Carlos Núñez (ha realizado, entre otos, los vitrales de la Iglesia La Begoña)
-          José Coronel.
-          Javier Téllez (Premio Bolsa de Trabajo Salón Arturo Michelena).
-          Eduít Colmenares (Premio Salón de Güigüe).
-          José Manuel Ávila.
-          Esmelin Miranda.
-          Pedro Domínguez.
-          Víctor Avellaneda (Premio Jóvenes  en Fia 2019).
-          Penélope Tovar.
-          Jonathan Suárez (Premio Salón Rotary 2019).
-          Renzo Rivera.
-          Alba Lucia Guerrero (Restauradora).
-          Gabriel Bazzone (Ilustrador).
-           Carolina López (Ilustradora).
-          Jesús García (Fotógrafo).
-          Elsa Adler (Gerente Cultural)
-          Lidia Rodrigo (Gerente Cultural).
-          María Blanca Rodríguez (Gerente Cultural) actual Directora de Cultura de la UC.

Es necesario recordar también a una generación de  artistas que han formado parte  del personal docente, entre ellos:

-          Simón Guedez.
-          Antonio Aguilar.
-          Rubén Colombo.
-          Jorge Rodríguez.
-          Eva Rodríguez Taño.
-          Josefa Colmenares.
-          Alfredo Gómez.
-          José de La Rosa.
-          Waleska Pons.
-          Donata Bazzochi.
-          Miguel Cabrera.
-          Benito Betancourt.
-          William Varela.
-          Rafael Meza.
-          Hugo Barroeta.
-          Namia Leal.
-          Carlos Rojas.
-          Marduk Sánchez.
-          Luis Noguera.
-          Humberto Jaime Sánchez.
-          Víctor julio González.
-          Bárbara correa.
-          Rafael Martínez.
-           José Contreras.
-          Vigeo Saule.
-          Marcos Castillo.
-          Clemente Martínez.
-          Gilimar Navarro.
-          Alfredo Gómez.
-          Valdemar Romero
-          Eduit Colmenarez.

            Durante la Junta de Gobierno, el 08 de julio de 1958, se declara a la Escuela  Arturo Michelena en período de reorganización quedando suspendidas las actividades docentes y administrativas, se designó una comisión  organizadora, entre sus miembros se encuentra Braulio Salazar
.
            El 31de enero de 1959, por intermedio de Gaceta Oficial  del  Estado Carabobo, se anuncia el inicio de inscripciones para los cursos de: Dibujo, Pintura, Escultura, Cerámica, Grabado y Esmalte.

            Para año de 2020, el Pensum de estudios (Cuatro años de escolaridad) de la Escuela de Artes Arturo Michelena es el siguiente:
- Pintura I, II, III, IV.
- Dibujo I, II, III, IV.
- Escultura I, II, III, IV.
- Historia Social del Arte I, II.
- Lenguaje Plástico.
- Tecnología de los Materiales.
- Análisis  y Apreciación Artística.
- Cerámica.
- Pensamiento Gráfico.
- Inglés I, II.
- Historia del Artes Latinoamericano.
- Metodología de la Investigación.
- Principios de Conservación y Restauración.
- Estética.
- Fotografía I, II.
- Artes Gráficas.
- Historia del Arte Venezolano.
- Gerencia Cultural.
- Arte Digital.

Además del los cursos regulares en la Escuela se dictan los siguientes talleres:

- Taller Infantil: Dibujo, Pintura y Medios Tridimensionales.
- Taller Juvenil: Dibujo, Pintura y Medios Tridimensionales.
- Taller Libre de Pintura Adulto.
- Taller Libre de Dibujo Adulto.
- Taller Libre de Cerámica Adulto.

            A partir de 1963, el Concejo Municipal de Valencia establece la beca “Arturo Michelena” para seguir estudios en Europa, entre los beneficiados se tienen, entre 1963 y 1974 a: Armando Pérez, Marcos A Castillo, Rafael Pérez, Vladimir Zabaleta, Manuel Mérida, Suardo Castillo,  René Ugarte, Nordis Velásquez. A finales del siglo XIX  y en el siglo XX para profundizar el oficio y para triunfar habían dos caminos: irse primero a Caracas y después al extranjero, en caso de Braulio Salazar se fue a México, pero la “Meca” era Francia. Salir del terruño, de la patria y de la matria  es llenarse de nuevas tendencias y conocer a los maestros. Soy de la idea trazar una política académica integral en donde se oficialice traer a los maestros y académicos en todas las ramas a dictar curso en todos los niveles y modalidades, por una temporada corta o larga. Así como aplicar lo que yo llamo “Arte Inverso”, decir, estudiar ¿cómo llegó el artista a la obra? desnudarla, deconstruirla. Yo veo más interesante cuando un historiador me explica como fue la aventura de la construcción de la obra escrita que la obra misma. Claro está hablar de eso en los tiempos actuales es una quimera.

            Dejemos de soñar en estos momentos y continuemos con nuestro asunto, así tenemos que en el año de 1963, la Escuela de Música Sebastián Echeverría fue declarada en reorganización y es inscrita en el Ministerio de Educación, la Escuela de Artes Plásticas no, porque el maestro Braulio Salazar se negó a ello. A partir de esa fecha han sido varios los intentos por cambiarle la estructura curricular y el nivel académico formal de la Escuela. Pase lo que pase, sostengo que el artista no vale por el título guindado en la pared (como diría Chuchú Pietro: “el cuero de tigre”) sino por su genialidad. También sostengo la necesidad de mantener las cátedras libres infantil y juvenil.

            Para el año de 1971, la Dirección de la Escuela Arturo Michelena propone la reorganización de las cátedras existentes.

            Ya para finalizar quiero rendirles un tributo y un recordatorio a  los artistas plásticos que han fallecido, en estos primeros veinte años del siglo, ligados a la Escuela Arturo Michelena, que nacieron o vivieron en Carabobo: 

- 24 de julio de 2006 Alexis Mujica. (nace en Tucacas en  1952).
- 26 de diciembre de 2008 Braulio Salazar. (nace en Valencia en 1917).
- 23 de agosto Felipe Herrera 2010. ( nace en Valencia en 1947).
- 26 de noviembre 2010 Luis Guevara Moreno. (nace en Valencia en 1926).
- 02 de octubre de 2012 Jorge Pérez -Zerep-.  (nace en Valencia en 1947).
- 03 de abril de 2013 Vladimir Zabaleta. (nace en Valencia en 1944).
- 06 de marzo de 2017 Marcos Castillo -Marc-.  (nace en Valencia en 1939).
- 30 de junio de 2019 Jorge Véliz. (nace en Valencia en 1949).
- 01 de marzo de 2020 Policarpo Contreras. (nace en Morón en 1920).
Y  comenzando el año muere Rubén Colombo, en España.

            Ya que recordamos a los que han partido físicamente, pero que estarán eternamente vivos a través de su Obra, vamos a mencionar aquellos artistas que han tenido la responsabilidad de dirigir los destinos de esta Escuela, tenemos que:  Desde 1948 hasta la actualidad han sido directores de la Escuela:

1.- 1948-1970: Braulio Salazar.
2.- 1971-1979: Humberto Jaimes S.
3.-1979-1980: Vladimir Zabaleta.
4.- 1980-1996: Ramón Belisario.
5.- 1998-2000: Miguel Cabrera.
6.- 2000-2003: Mercedes González.
7.- 2003-2004: Francisco Bugallo.
8.- 2004–2006: Héctor Alvarado.
9.- 2006-2008: José La Rosa.
10.- 2008-2009: Marta Iribarren.
11.- 2009-2010: Pablo Freites.
12.- 2010-2012: Jorge Rodríguez.
13.- 2012-2014: Hugo Barroeta.
14.- 2014- 2015: Luis Noguera.
15.- 2015-2016: Froila Gómez.
16.- 2016-2017: Lisbeth Cedeño
17.- 2017-2018: Eunice Ortiz.
18.- 2019-2020: Marquelys Landaeta.

             La Escuela Arturo Michelena en sus primeros  cincuenta y dos años (52)  tuvo  cinco directores y  en los últimos  veinte (20) años ha tenido  13  directores sin contar a los encargados de la Dirección.  Siempre he sostenido que lo alternativo en el poder y en las direcciones son justas y necesarias, pero no comparto una constante rotación sujeta a los vaivenes de la política o el amiguismo, ya que ello conlleva a un eterno comenzar  y a la  improvisación en la gestión realizada. Como se ha visto en el desarrollo histórico del arte en nuestros países  latinoamericanos, la relación del arte con la política siempre ha sido tóxica.

            En las escuelas de artes de aquí y en el planeta, el docente y el director se gana con su trabajo el título de Maestro. El Maestro  - con mayúscula -  para los artistas  en todas sus disciplinas y áreas de actividades, tiene una connotación  muy significativa y especial. Cuando en las escuelas básicas vemos a los alumnos decirle a sus maestras “Mae” o “profa” comprobamos que la figura del maestro se ha desdibujado en la instrucción formal. En cambio en los artistas la palabra maestro tiene una significación de admiración y sobre todo respeto, casi reverenciar, cuando se dice maestro se quiere decir: - Yo reconozco tu trabajo, reconozco tu nivel académico, reconozco que tú eres digno de ejemplo por tu trayectoria.
 
            Quisiera mencionar al personal académico (maestros), directivo, administrativo y trabajadoras, veintiocho abnegados seres humanos  que luchan cada día por mantener esta prestigiosa Escuela de pié y luchando verdaderamente por el amor al Arte, ellos son:

Docentes:
Marta Iribarren
Lisbeth Cedeño
Pablo Freites
José Hugo Barroeta
Geczain Tovar
Benito Betancourt
Richard Camacho
Rafael Meza
Oscar Hernández Maru Pinto
William Valera
Estrella Dedan
Míriam Perales
Wladimir  Da´Costa
Homero Palacios
Francisco Hernández
Nania Leal
Renzo Rivera
Jorge Rojas
Vanesa Pulido
Carvince Nicastro
Sandra Escalona
Patricia Alvarado.
Secretaria:
María E. García.
Mantenimiento: Zoraida Ochoa.
Iris Castillo.
Sub-Directora:
Froila Gómez.
Directora:
Marquelys   Landaeta

            Cuando se inició la Escuela en 1948, como hemos visto, su horario era nocturno, su pensum de estudios era dirigido a jóvenes y adultos. Pero, cuando repasamos a los grandes pintores de Carabobo, Venezuela y el mundo, todos han comenzado sus inclinaciones artísticas desde niños. Por ello, quiero insistir, en la necesidad de  mantener en esta Escuela   los Talleres Libres Infantiles, para que despierten y desarrollen  su creatividad y convertirlos en futuros estudiantes regulares de la Escuela, en otras palabras: ellos son el semillero que en un futuro cercano florecerá en la Escuela.  Me gustaría, proponerles, que  en esta Escuela se inicie la cultura de rescatar su Memoria Histórica así como la de sus Archivos, material humano, talento y creatividad sobran para emprender esta propuesta.

            Quiero concluir expresando que: en estos tiempos de crisis innegables, es  indispensable mantener y defender esta Escuela. Se debe profundizar el sentido de pertenencia y el orgullo  de ser parte de esta hermosa Institución.


REFERENCIAS

Boulton, Alfredo (1971). Historia abreviada de la pintura en Venezuela. Tomo II. Caracas. Monte Ávila Editores.

Contreras, Gustavo (1996). Personajes de la Valencia de hoy. Valencia. Dirección de Cultura de la Universidad de Carabobo.

Figuera M, Mariana (1997). Andrés Pérez Mujica. En: Diccionario de Historia de Venezuela. Segunda Edición. Caracas. Fundación Polar.

Galindez, Luisa (1990). Historia de Valencia 1901-1950. Tomo II. Valencia. Editorial E.G.N. Comunicaciones.

Galindez, Luisa (1991). Historia de Valencia. Siglo XIX. Segunda Edición. Valencia. Secretaria de Cultura. Ediciones del Gobierno de Carabobo.

García Jiménez, Luis Rafael. (1990). Monseñor Adam Hacedor de Cultura. Valencia. Ediciones de la Universidad de Carabobo.

García Jiménez, Luis Rafael.(2006). Biografía de Arturo Michelena. En: García Jiménez, Luis Rafael.

Grooscors, Enrique (1968). Pasión y acontecer de la instrucción en Carabobo. Valencia. Biblioteca de Autores y temas carabobeños.

Guedez, Colina y otros (1998).  50 años, 50 artistas. Revista Escuela de Artes Plásticas Arturo Michelena. Valencia. Editada por el Diario El Carabobeño.

Guerra, Rafael Saturno (1988). Recado Histórico sobre Valencia. Tercera Edición. Valencia. Ediciones del Concejo Municipal.

Páez, Yasmira (2012). La Escuela de Artes Plásticas Arturo Michelena. Su historia 1948 – 2000.  Valencia. Ediciones Signo.

Núñez, Enrique Bernardo (1992). Temas del Cuatricentenario. Segunda Edición. Valencia. Secretaría de Cultura. Gobierno de Carabobo.

Núñez, Luis Augusto (1987).  Evolución y Génesis de la Cultura en Carabobo. Tomo II. Valencia. Biblioteca de autores  y temas carabobeños. Ejecutivo del Estado Carabobo.

Salazar, Elida (1997). Pintura. Siglos XVI – XVIII. En: Diccionario de Historia de Venezuela. Segunda Edición. Caracas. Fundación Polar.

2 comentarios:

  1. Faltó nombrar a la Profesora Donatta Basocchi quien también fue directora encargada de la institución. Gracias

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  2. Muchas gracias por su gran aporte Maestro Luis Rafael García Jimenez, busque información por internet y este blog contiene la información mas completa que he encontrado.

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